Globo de la suerte
Durante un paseo, Daniela le pidió a una señora que sostuviera su “globo de la suerte”. Luego, comenzó a invitar a las personas a darle dinero, diciendo que eso les traería buena suerte. Lo que parecía solo un gesto divertido, se transformó en un acto de bondad que sorprendió y emocionó a la señora. A veces, los momentos más simples pueden cambiarle el día a alguien. Esta fue una muestra hermosa de cómo se puede usar la influencia para hacer el bien.